Los drones se están convirtiendo rápidamente en una presencia omnipresente en una variedad de industrias, desde la fotografía hasta la entrega de productos. Sin embargo, un desafío que enfrentan los fabricantes y operadores de drones es la duración limitada de la batería de la mayoría de los drones, lo que puede restringir la cantidad de tiempo que un dron puede pasar en el aire.
Una posible solución a este problema es diseñar drones que puedan aprovechar la fuerza del viento para extender sus tiempos de vuelo. En este Blog voy a comentar un nuevo dron de inspección que se ha desarrollado teniendo en cuenta esta capacidad.
Antes de profundizar en los detalles del nuevo dron de inspección, es importante comprender los desafíos que enfrentan los fabricantes y operadores de drones en términos de duración de la batería. La mayoría de los drones funcionan con baterías de iones de litio, que tienen una capacidad limitada y pueden tardar mucho en recargarse. Además, el peso de las baterías puede limitar la maniobrabilidad y la velocidad del dron, haciéndolo menos eficiente en ciertas situaciones.
Para abordar estos problemas, algunos fabricantes de drones han desarrollado drones híbridos que utilizan una combinación de baterías y motores de gasolina. Estos drones pueden volar durante períodos de tiempo más largos y cubrir mayores distancias que los drones que funcionan con baterías, pero a menudo son más pesados y costosos.
Otra posible solución es diseñar drones que puedan aprovechar la fuerza del viento para prolongar sus tiempos de vuelo. Este enfoque se ha utilizado con éxito en planeadores y otras aeronaves, pero aún no se ha adoptado ampliamente en la industria de los drones.
El nuevo dron de inspección del que hablaremos en este artículo ha sido desarrollado por Elythor, lo han llamado Morpho , y sus alas son orientables según como venga el viento para ayudar en su sustentación. Se puede ver una foto más abajo.
La característica clave del dron es su capacidad de usar el viento para extender su tiempo de vuelo. El dron está equipado con unas alas que se pueden extender en la dirección adecuada para aprovechar el viento que circula, reduciendo así su consumo y por lo tanto alargando la duración del vuelo.
El dron también está equipado con una gama de sensores y cámaras que le permiten capturar imágenes y datos de alta resolución del objeto que se está inspeccionando. Estos sensores pueden detectar grietas, corrosión y otros defectos que pueden no ser visibles a simple vista, lo que permite a los ingenieros e inspectores identificar posibles problemas antes de que se agraven.
El uso de la energía eólica para extender el tiempo de vuelo de los drones tiene varios beneficios potenciales. En primer lugar, puede permitir que los drones funcionen durante períodos de tiempo más prolongados sin necesidad de recargar o repostar con tanta frecuencia. Esto puede ser especialmente útil para aplicaciones como la inspección de infraestructura, donde los drones pueden necesitar volar durante bastante tiempo.
Además, al aprovechar el viento se puede reducir el peso y el costo del dron al eliminar la necesidad de baterías más pesadas. Esto puede hacer que el dron sea más maniobrable y fácil de transportar, al mismo tiempo que reduce su impacto ambiental.
De todas formas, como la actividad del viento es variable, resulta algo más difícil predecir el tiempo que el dron será capaz de permanecer en el aire realizando su trabajo.
Se puede ver un vídeo en: https://youtu.be/tOUkn7YmYV4