En la era digital, los sistemas informáticos se han convertido en una herramienta esencial para el trabajo. Los trabajadores utilizan estos sistemas para realizar sus tareas, comunicarse con sus compañeros y acceder a la información. Sin embargo, estos sistemas también pueden utilizarse para controlar a los trabajadores de forma online.
Los sistemas informáticos pueden utilizarse para controlar a los trabajadores de diversas formas. Algunas de las más comunes son:
- Seguimiento de la actividad: Los sistemas informáticos pueden registrar la actividad de los trabajadores, como el tiempo que dedican a cada tarea, las páginas web que visitan o las aplicaciones que utilizan.
- Monitorización de la ubicación: Los sistemas informáticos pueden utilizarse para rastrear la ubicación de los trabajadores, por ejemplo, mediante el uso de teléfonos móviles o dispositivos GPS.
- Filtrado de contenido: Los sistemas informáticos pueden utilizarse para filtrar el contenido al que acceden los trabajadores, por ejemplo, para evitar que accedan a sitios web o aplicaciones no autorizados.
- Registro de las comunicaciones: Los sistemas informáticos pueden utilizarse para registrar las comunicaciones de los trabajadores, como los correos electrónicos, las llamadas telefónicas o las conversaciones en las redes sociales.
El control online de los trabajadores puede tener diversas consecuencias, tanto positivas como negativas.
Consecuencias positivas:
- Mejora de la productividad: El control online puede ayudar a las empresas a mejorar la productividad de los trabajadores, ya que pueden identificar las áreas en las que se puede mejorar el rendimiento.
- Prevención de fraudes: El control online puede ayudar a las empresas a prevenir fraudes, como el robo de información confidencial o el uso indebido de los recursos de la empresa.
- Mejora de la seguridad: El control online puede ayudar a las empresas a mejorar la seguridad de sus sistemas informáticos, ya que pueden identificar y bloquear posibles amenazas.
Consecuencias negativas:
- Disminución de la privacidad: El control online puede suponer una violación de la privacidad de los trabajadores, ya que estos sistemas pueden recopilar una gran cantidad de datos personales.
- Aumento del estrés: El control online puede aumentar el estrés de los trabajadores, ya que pueden sentirse vigilados constantemente.
- Disminución de la motivación: El control online puede disminuir la motivación de los trabajadores, ya que pueden sentirse como si estuvieran siendo tratados como máquinas.
Hasta donde yo sé, en Europa estas prácticas están prohibidas, pero desconozco lo que hacen las empresas sin que nosotros lo sepamos. Y lo que me parece muy importante es que los trabajadores conozcan las posibilidades de la tecnología y puedan tomar diversas medidas para protegerse del control online, como:
- Ser conscientes de las políticas de privacidad de la empresa: Los trabajadores deben leer atentamente las políticas de privacidad de la empresa para saber qué datos personales están recopilando los sistemas informáticos.
- Utilizar una conexión VPN segura: Los trabajadores pueden utilizar una conexión VPN segura para proteger su privacidad cuando acceden a los sistemas informáticos de la empresa desde fuera de la oficina.
- Evitar utilizar dispositivos personales para trabajar: Los trabajadores deben evitar utilizar dispositivos personales para trabajar, ya que estos dispositivos pueden ser más vulnerables al control online.
Pero lo más importante es que los gobiernos tomen las medidas necesarias para proteger a los trabajadores del control online, como:
- Legislación sobre privacidad: Los gobiernos deben promulgar leyes que protejan la privacidad de los trabajadores, por ejemplo, prohibiendo el uso de sistemas de control online que recopilen datos personales sensibles.
- Regulación de los sistemas de control online: Los gobiernos deben regular los sistemas de control online para garantizar que se utilizan de forma responsable. Y lo más importante: comprobar que se cumpla.
El control online de los trabajadores es una realidad que está en aumento. Las empresas pueden utilizar estos sistemas para mejorar la productividad, prevenir fraudes y mejorar la seguridad. Sin embargo, la privacidad de las personas debe de estar garantizada por encima de todo.
No todo vale, ni en el trabajo, ni fuera de él. Y debemos de luchar sin desmayo por nuestra independencia y nuestra privacidad.