Cada día se oye hablar más de vehículos dirigibles ( LTA (Lighter Than Air) en inglés ), y casi todos tienen una característica en común y es que usan helio para elevar la aeronave, en lugar de hidrógeno. Está claro que nadie se olvida del Hildenburg aunque haya pasado mucho tiempo desde la catástrofe del año 1937.
Hay varias start-ups por el mundo poniendo en marcha vuelos de diferentes modelos de dirigibles, y seguro que aparecerán algunas más, pues pueden ser una alternativa para el transporte de mercancías y personas que no requieran una elevada velocidad de transporte.
Ya hay modelos que son capaces de elevar hasta 60 toneladas de peso de la empresa francesa Flying Wales, que es una cantidad nada despreciable a ser transportada.
Para ser capaces de volar de manera sostenible la mayoría dicen que van a usar pilas de combustible de hidrógeno, pero en la actualidad hay pocas aeronaves de este tipo haciendo vuelos de prueba.
Se puede ver un vídeo en: https://youtu.be/7VLs9VbT_7s
El mayor inconveniente de estas aeronaves es que son difíciles de pilotar con mal tiempo ( viento, etc … ), y su gran ventaja es que pueden aterrizar en cualquier lugar más o menos plano, son capaces de elevar grandes pesos sin apenas consumo de energía, y que este tipo de transporte por el aire consume también poca energía y sin contaminar el medio ambiente.
Yo tengo bastante claro que van a llegar a ser una realidad más pronto que tarde, pues el reto de la Crisis Climática es muy grande y urgente, y debemos de encontrar diferentes maneras de transportas cosas y personas sin generar contaminación.
Hoy por hoy, la mayoría de estas empresas solo son apenas ideas para intentar convencer a posibles inversores, unos vídeos, y algún que otro prototipo. Pero eso puede cambiar con bastante rapidez.
Veremos lo que nos depara el tiempo, pero tengo que reconocer que la idea me gusta bastante.