Como ahora casi todos los productos son “inteligentes”, las pistolas no podían ser una excepción, y varias empresas están anunciando en USA ofertas de sus pistolas inteligentes.
En mercado norteamericano es especial, pues es allí donde más armas se compran del mundo. Solo en el año 2020 se compraron un record de más de 23 millones de pistolas, y cerca del 40% de los adultos dispone de un arma en su casa. Un gran negocio se mire por donde se mire, y por eso las asociaciones de defensa de las armas son tan combativas en los derechos para la utilización de las armas.
Ahora a las pistolas se les añaden diferentes dispositivos para que solo puedan ser usadas por sus dueños, y se les pone el adjetivo de inteligentes, con el aumento de precio que eso supone.
Reconozco que es una medida de seguridad adicional y puede evitar que a alguien le roben la pistola y la usen en otro atentado; aunque también ya se han dado casos de fallos en estos sistemas de supuesta protección.
Unas tienen detectores de huella para asegurar que solo la usa su propietario; otras necesitan de un anillo en la mano del que la usa; otras una pulsera especial; otras …… las posibilidades son muchas y seguirán apareciendo algunas nuevas.
A partir de este año y los siguientes se espera que crezca mucho este mercado de las pistolas inteligentes en USA, y es de suponer que más tarde le siga el resto del mundo.
El “problema” de fondo es el hecho de que una gran parte de la población de un país sienta que “necesita” tener una pistola para protegerse, y que sean muy fáciles de comprar por cualquiera y sin apenas control.
En el año 2020 en USA se produjo el mayor aumento de homicidios desde el año 1960, que coincide con el record en la venta de armas. Alguna relación tiene que existir y no hay que ser muy listo para verla.
Bienvenidos sean los productos “inteligentes”, pero una sociedad inteligente es la que no necesita que sus ciudadanos estén armados. Para protegernos están las fuerzas de seguridad.
ES 
EN