Está muy claro que la solución para no tener CO2 en la atmósfera es no generarlo mediante la utilización de fuentes alternativas no contaminantes, pero como eso no va a suceder de un día para otro, y por lo tanto cualquier alternativa complementaría es bueno que sea analizada y probada.
Sabiendo que la mejor alternativa es dejar de contaminar lo antes posible.
En mi opinión esto es lo que se va a hacer con la planta de extracción de CO2 recientemente puesta en marcha en Islandia. La planta se llama Orca y cuando esté a pleno rendimiento será capaz de extraer de la atmósfera 4.000 toneladas de CO2 al año.
El costo de la planta está entre 10 y 15 millones de euros, y el CO2 que retira de la atmósfera es lo que contaminan 870 coches en un año. Lo cual nos da una idea de lo importante que es “no contaminar”, y de que deberíamos de invertir en eliminar la contaminación, pues retirarla resulta muy costoso.
Explicado de manera sencilla, la planta dispone de grandes ventiladores que hacen pasar el aire exterior por filtros que retienen el CO2 para ser luego concentrado e inyectado a una profundidad de 1.000 metros bajo la superficie de la tierra donde se mineraliza.
Esta es una planta prototipo para ver resultados y aprender como se podría mejorar y abaratar el proceso, que como decía antes es muy costoso.
Hay gente que se opone a este tipo de soluciones por lo costosas que son y porque algunos políticos están tentados de creer que se puede seguir contaminando contando con la idea de que “un día” se podrá retirar dicha contaminación.
Yo creo que se debe de probar cualquier alternativa que mejore la situación ya muy contaminada de nuestra atmósfera, pero es cierto que hay que insistir que la solución pasa por dejar de contaminar cuanto antes.
ES 
EN 