Desde hace muchos años existe la posibilidad de adquirir un audiolibro, que es un fichero de audio en el que una persona nos lee un libro. Y eso le gusta a mucha gente, aunque no sea excesivamente popular.
Pero desde hace poco, Amazon ofrece a las personas que auto-publican sus libros en la Kindle Store de EEUU que puedan acceder a una nueva herramienta que mediante la IA una “voz virtual” convierte ese libro en un audiolibro y lo ofrece en la plataforma Audible.
Esta innovación supone un antes y un después para los autores auto-publicados, especialmente en Estados Unidos. Gracias a esta herramienta, cualquier persona que publique su libro en la Kindle Store de ese país podrá convertirlo a audiolibro de forma sencilla y rápida, sin necesidad de contar con un narrador profesional.
Lo que antes les costaba cerca de 700 dólares y una espera de tres o cuatro semanas, ahora lo tienen de manera gratuita y en menos de una hora. Y aunque la calidad y la entonación de la lectura posiblemente no sea la misma, dicen que es más que aceptable, y a un precio imbatible.
De esa manera la plataforma Audible ha aumentado su catálogo en más de 50.000 nuevos audiolibros en muy poco tiempo.
El proceso es simple: el autor sube su libro electrónico a KDP y selecciona la opción de convertirlo a audiolibro. La herramienta de IA se encarga de analizar el texto y generar una narración utilizando una voz sintética. El autor puede elegir entre diferentes voces y ajustar la velocidad de lectura.
Las ventajas son el precio ( cero ) y la rapidez de la realización del audiolibro. Y la calidad del sistema de IA irá mejorando con el tiempo y el uso, y acercándose a la de los humanos.
Tengo claro que a pesar de las posibles limitaciones, la llegada de la IA a la creación de audiolibros tiene el potencial de democratizar aún más el acceso a la cultura y la lectura, permitiendo que más personas puedan disfrutar de libros en formato audio
Por lo tanto, la IA se presenta como una herramienta poderosa que puede transformar el panorama de los audiolibros. Si bien es cierto que existen algunas desventajas que deben ser consideradas, las ventajas que ofrece son innegables. Queda por ver cómo evolucionará esta tecnología en el futuro y qué impacto tendrá en la industria editorial
Vemos que la IA se incorpora en más actividades cada día, y en muchos casos las transforma en profundidad. Pero no usar esta tecnología no es una opción inteligente.
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